Para mí ser del Oviedo significa mucho sacrificio y sufrimiento, pero también hay momentos de alegría. Esta tarde es el derbi con el Sporting de Gijón, un partido muy importante. No solo por la rivalidad. El Oviedo tiene que terminar bien lo que queda de temporada.

Ser del Oviedo es tener muy presente nuestro lema de orgullo, valor y garra. Significa querer a tu equipo y todo lo que este representa. Es verdad que muchas veces nos hace sufrir, pero sino no sería el Oviedo.

Ser del Oviedo significa seguirlo en Tercera División o donde esté. Es no abandonarlo nunca. Es sentir los colores. Unas veces llorar con él y otras llorar de alegría, depende de la situación, pero siempre del Oviedo, siempre.

Mi primer recuerdo con el Oviedo

El primer recuerdo que tengo con el Real Oviedo fue en el leñero donde mi abuelo tenía un cromo de Carlos. Era un jugador del Oviedo. Yo le preguntaba por él. Era pequeño, no sabía quién era. Después ya empezaba a conocer el club en los tiempos de Onopko, Dely Valdés, Juanchi y Paulo Bento. Tengo firmados dos fotos de estos dos últimos y las conservo. Además de mi camiseta de Juanchi.

Gracias a mi hermano, a mi padre y mi abuelo

Gracias a ellos soy del Oviedo. Es un sentimiento que va mucho más allá. Es sentir los colores. Es animar a los tuyos, pese a las circunstancias con orgullo, valor y garra.

No es algo que se pueda explicar con claridad, es algo que se siente. Que se siente desde bien pequeño. Siempre ha sido así.

Así que hoy esperemos que gane mi Oviedo. Que mi jugador favorito esté en plena forma como siempre. Vamos, Borja.

¡Hala Oviedo!

Foto: Real Oviedo.