Cada final de mes reviso en la plataforma online las ventas de mis libros online. En mi vida hubiera pensado vender hasta la fecha un total de 90 libros. Estoy muy agradecido a todas aquellas personas que han comprado mis libros. Gracias de corazón.

Recuerdo cuando me llegaron las dos primeras cajas de mi primer libro a casa. Le dije a mi madre, que en paz descanse: ¿cómo voy a vender todos estos libros? Ella me dijo, «los vendes enseguida, ya verás». Qué razón tenías mamá. Eran mis 100 primeros libros y sí, se vendieron rápidamente.

Estaba muy emocionado cuando me llegaron los libros a casa de crimen en Moniello. No podía creer que había escrito mi primer libro. Sí, es corto, pero no importa la cantidad de páginas, sino la calidad. Las reseñas que he recibido han sido positivas. La gente no podía dejar de leer. Les había enganchado por completo.

No es fácil escribir un libro. Una editorial, bien de sea de autopublicación o profesional, no publica tu libro solamente por pagarlo. Lo lee previamente y si tiene la calidad suficiente para ser publicado, se publica en su catálogo de libros. Todo tiene un proceso y hay que tener paciencia.

Muchas gracias a la editorial Círculo Rojo por apostar por mí y permitirme publicar hasta ahora dos libros: crimen en Moniello y asesinatos en Luanco que forman parte de una trilogía que se desarrolla en el lugar que tanto quiero, Luanco, donde conocía a mis mejores amigos cuando tenía doce o tres años y hasta hoy. Las amistades hay que cuidarlas. Tengo pocos amigos, pero los que tengo, son de calidad. Nia, tú también formas parte de mi grupo de amigos desde hace poco, pero te tengo mucho cariño en poco tiempo. Has demostrado ser una buena persona, que es lo verdaderamente importante. Gente auténtica, gente con valores, gente que no mienta. Porque si algo odio por encima de todo, es la mentira. Yo voy con la verdad por delante. Como decía una amiga mía de Madrid: «eres transparente».

Así que este 2024 espero que salga publicado el tercer libro que cierra la trilogía de crimen en Moniello y va dedicado íntegramente a mi madre que en paz descanse.

Mi mantra: fuerza y lucha.